MADRES E HIJOS, conmovedora

El reencuentro de una madre y la pareja de su hijo muerto entre rencores, prejuicios y tensiones

Actúan: Selva Alemán, Nicolás Francella y Sergio Surraco – Ambientación: Martín Roig – Escenografía: Jorge Hugo Ferrari – Iluminación: Mariano Demaría – Autor: Terrence Mc Nally – Dirección: Luciano Suardi

Escrita por el dramaturgo norteamericano Terrence McNally, esta pieza narra la historia de una mujer que pierde a su hijo por el VIH. Al fallecer su marido -envuelta en el duelo de estas pérdidas irreparables- decide ir a la casa del hombre que amó y acompañó a su hijo en sus últimos años de vida. El encuentro se produce en el departamento donde el hombre habita feliz con su nueva pareja e hijo, frente al Central Park de Nueva York. Ella enfrenta al hombre que nunca había aceptado, culpándolo del desenlace, y él a una mujer abrumada, que niega la realidad y procura desesperadamente encontrar sentido a su propia vida, buscando respuestas en el pasado de su hijo.

El antagonismo entre las cargas emocionales genera tensión e incomodidad, alternada con divertidas situaciones de vida, con muy hábil dirección de Luciano Suardi, que dosifica la información de los personajes para crear una atenta devolución de la platea. El tema ahonda en la maternidad y sus responsabilidades, la sexualidad, la mirada del otro y las consecuencias que arrastran al dolor provocando el encierro en sí mismo.

Selva Alemán brilla y conmueve en su rol. Con una capacidad interpretativa inigualable, compone a la madre, llena de prejuicios y atrapada por la soledad, con nobles sentimientos que buscan salir a la luz. Sergio Surraco juega ágilmente y se apodera de momentos con matices que atraviesan cuatro generaciones en la historia teñida por heridas del pasado. Es el responsable de hacerle entender a la madre sus equivocaciones y encontrar un camino de alivio para seguir adelante. Nicolás Francella sorprende con creces en su excelente interpretación de un joven que deja fluir sus sanos celos por la historia de su pareja. Entiende y aprueba, con una mirada hacia el futuro junto a la familia que ha formado.

La ambientación de Martin Roig es un acierto, pues ha generado cálidos espacios en los que se pueden observar elementos que reflejan la personalidad de quienes allí habitan. De hecho, la estructura de estilo conservador del departamento nos identifica con la personalidad rígida de la madre. El diseño de luces de Mariano Demaria es muy cuidado, con una intensidad acorde a los momentos de escenas íntimas.

En esta historia el tiempo es el mejor amigo de la verdad y despoja de todo prejuicio la angustia y los miedos, ante arraigadas ideas sobre los prejuicios en la elección sexual y los nuevos modos de encarar la maternidad. Sergio Boaglio

Miércoles a domingo
Teatro Multiteatro
Av. Corrientes 1283 – Cap.
(011) 4382-9140

Publicado en:

Deja una respuesta