Vesselina Kasarova es una excepcional vocalista. La Camerata Bern es una agrupación de excelencia. Juntos dieron lo mejor de si en el concierto inicial de la Temporada 2013 del Mozarteum Argentino. El violinista alemán Florian Donderer comenzó marcando los tiempos de la Camerata Bern en las piezas del suizo Fabian Müller, de folclórica inspiración y con un variado y entretenido juego en todas las cuerdas. El relato es bucólico y sorprendente, y todo sucede en las praderas de su país natal.
En la segunda parte, representando a Cherubino, de Las bodas de Figaro, la búlgara Vesselina Kasarova demostró porqué fue ahijada artística de Herbert von Karajan. Con gran energía y precisión, aunque más oscilante en los graves, entonó Non so più cosa son y Voi che sapete. Fue tomando color, fuerza y personalidad a partir de las arias de La Clemenza di Tito, especialmente en Parto, ma tu ben mio junto al protagónico juego del clarinetista Philip Arkinstall.
Después del entreacto, impactó con la variable tonalidad del recitativo O Patria de Tancredi. Luego de la cavatina Di tanti palpiti y el rondó Perché turbar la calma di questo cor se la notó definitivamente distendida y expresiva, interpretando vocal e histriónicamente a cada personaje. El final con Semiramide de Rossini y el bis con la célebre Una voce poco fa demostraron que Kasarova, después de 24 años de carrera, está en pleno apogeo.
La Camerata Bern se lució con una versión deliciosa de la Sinfonía No. 40 de Mozart y con la llamativa obertura de L’isola disabitata de Haydn. Donderer también demostró que su ensamble estuvo impecable en el acompañamiento de Kasarova, particularmente el mozartiano, brillando por reflejo de su voz de gran presencia. Martin Wullich
Fue el martes 9 de abril de 2013
Teatro Colón
Libertad 651 – Cap.
(011) 4378-7100
mozarteumargentino.org
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