El término quantum refiere, en el contexto de la ciencia, a la cantidad discreta de energía más pequeña que puede ser absorbida, propagada o emitida por la materia. Dicho con otras palabras, se trata del valor mínimo que puede tomar una magnitud en un sistema físico, y de la variación mínima posible de este parámetro al pasar de un estado a otro. Puede parecer un concepto complejo, y se pone peor cuando nos enteramos de que para la física cuántica un cuerpo cualquiera puede comportarse de diferentes maneras, como si tuviese una doble naturaleza, según lo estemos viendo o no. Qué tuvo en cuenta Camilo Santostefano de todo esto, a la hora de bautizar a su grupo vocal de cámara con el particular nombre de Musica Quantica es algo que no sabemos. Pero podemos dar fe de que, así como las partículas que son objeto de estudio de la física cuántica pueden ser dos cosas diferentes a un mismo tiempo, este cuerpo de voces es un exquisito coro a la hora de interpretar música antigua, a la vez que demuestra una cabal capacidad cuando se propone como un ensamble especializado en repertorio contemporáneo.
El flamante disco homónimo del ensamble, editado por el sello especializado en música coral Pulso70, abre con dos piezas de Claudio Monteverdi (1567-1643). Sin embargo, fueron las obras más recientes incluidas en este disco las que integraron el programa que el grupo ofreció como parte del ciclo que se desarrolla habitualmente, con entrada libre y gratuita, en el Club Sirio Libanés, los primeros martes de cada mes, bajo la producción general de María José Maito. Así es como pudieron escucharse obras corales a capella del británico Ralph Vaughan Williams (1872-1958), del estadounidense Randall Thompson (1899-1984) y de los italianos Goffredo Petrassi (1904-2003) y Luigi Dallapiccola (1904-1975). Pero probablemente la joya del recital fue el estreno argentino (y tal vez sudamericano) de una obra del compositor estonio Veljo Tormis (1930-2017) titulada Raua needmine (La maldición sobre el hierro), escrita en 1972 para coro mixto y tambor chamán, de fuerte tono tribal. El texto, basado en la epopeya finlandesa del Kalevala, que además incluye versos de diferentes poetas estonios contemporáneos, aborda una leyenda que describe al hierro como fuente de un poder maligno y mortal, que debe ser superado. En esta obra, Santostefano se ocupó de tocar el tambor chamán indicado en la partitura -único instrumento que se sumó a las voces en todo el recital- quedando en este caso la dirección a cargo de Gastón Dvoskin.
Fundado por Santostefano en el año 2006, el coro de cámara Musica Quantica es reconocido con justicia, tanto entre el público como la crítica especializada, como uno de los más destacados grupos de su categoría en nuestro país. Formado por estudiantes y graduados de diferentes carreras musicales y por cantantes corales de gran experiencia, el ensamble ha sido distinguido con numerosos reconocimientos a nivel nacional e internacional. Pero sin duda el mejor premio que puede obtener un coro de estas características es el silencio atento con el cual un público cada vez más numeroso asiste a sus conciertos. Si tiene la oportunidad de escucharlos, tanto en disco como en vivo, no lo dude. Germán A. Serain
Club Sirio Libanés
Ayacucho 1496 – Cap.
(011) 4806-3002
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