Continuando con los festejos de conmemoración del 50mo. Aniversario de las relaciones diplomáticas entre Argentina y Corea, que hizo eclosión con la visita de la soprano Sumi Jo, en su calidad de cantante y también como integrante del Jurado del Concurso Internacional de Canto -organizado por el Instituto Superior de Arte del Teatro Colón- llegó el pianista Sunwook Kim.
La comunidad coreana estuvo de parabienes, recibida por la comunidad Amijai en su precioso templo de Belgrano. Impecable fue el recital brindado por el coreano Sunwook Kim, de una pulcritud y exactitud matemática. Con una técnica indiscutible, inició su concierto con la Sonata Quasi una Fantasia, de Ludwig van Beethoven. Parafraseando el título, quizás algo más de fantasía en la expresión del artista hubiera sido bienvenida.
Continuó con el compositor alemán y una de sus piezas más reconocidas y cuya especial magia radica en la expresividad del primer movimiento, en donde debería aparecer ese Claro de Luna que la ubica -tan iluminadamente- entre las 32 que compuso. Si bien la ejecución fue perfecta -e impactó en el Presto agitato final- adoleció de genuino sentimiento, ese que en manos de algunos maestros nos ha emocionado hasta el alma.
Aparentemente, Kim siente algo más cuando interpreta a Schubert, por lo menos eso fue lo reflejado en la estupenda Sonata en La mayor, que lleva número de catálogo 959. Y mucho más lo demostró en el bis, interpretando el Impromptu No. 4. Todo es cuestión de tiempo y el intérprete coreano es muy joven. Con 24 años de edad, le ha llegado el momento de relajarse, de saber que la técnica impoluta ya forma parte de su acervo y solo debe expresar emociones, sintiendo primero con su espíritu. Cuando lo logre, será impresionante. Martin Wullich
Fue el 4 de octubre de 2012
Templo de la Comunidad Amijai
Arribeños 2355 – Cap.
(011) 4784-1243
amijai.org
Comentarios