LA MEMORIA ESPARCIDA, poesía irlandesa

Intensidad y renovada tradición en 22 poetas actuales. Cuidada edición bilingüe

La memoria esparcida – Autores: Pat Boran, Patrick Chapman, Harry Clifton, Tony Curtis, Padraig Daly, John F. Deane, Patrick Deeley, Theo Dorgan, Eamon Grennan, Vona Groarke, Fred Johnston, Iggy McGovern, Paula Meehan, Gerry Murphy, Michael O’Loughlin, Mary O’Malley, Peter Sirr, Gerard Smyth, Jessica Traynor, William Wall, Macdara Woods y Joseph Woods.

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LA MEMORIA ESPARCIDA, poesía irlandesa

“Somos libres de avivar o apagar los fuegos que queramos desde los fragmentos de la modernidad, la memoria esparcida de la isla”.

Estos versos del poema de Patrick Deeley, La casa del fuego, dan título a la presente antología de poetas irlandeses contemporáneos -todos nacidos a partir de 1940- y resumen la esencia que ilumina sus trabajos. La generación de autores surgidos en la segunda mitad del siglo XX ya ha sorteado la pesada carga de los colosos fundadores: William B. Yeats, James Joyce; y los de la generación siguiente: Beckett, Kavanagh, McNeice. Han trascendido el aire provinciano, la endogamia insular, la recurrente mención a las montañas, los mitos celtas y la vida rural. Han integrado a la clase trabajadora en sus poemas y han viajado –y vivido- por todo el mundo como para dar un aire más ecléctico a sus composiciones.

Era pasada la medianoche cuando salimos
Los cohetes de Año Nuevo se apagaban
En las calles de Munich – el desorden del festejo,
Los petardos, el vidrio roto,
Y doscientos años de revolución
Tardando en irse, como un olor a azufre en la nariz…

(Harry Clifton, Tren nocturno  por el Brennero)

Claro que hay temas que han permanecido como fuerza capital en muchos de sus trabajos: la figura paterna, o los ancestros, presentes como una filigrana que subyace a toda existencia. Este sentimiento podría considerarse el diapasón que afina con el alma universal, tanto sea cuando honran el linaje o cuando lo sufren.

A menudo mientras yo crecía lentamente, dejabas escapar
una palabra, un gesto impotente o una mirada
que me sacudía hasta las raíces. Yo sentía el vacío
que tú repelías, obstinada, sudorosa, heroicamente.

(Theo Dorgan, Hablando con mi padre)

El lenguaje puro y la construcción delicada de las frases muchas veces espoleó como recurso contestatario frente a todos los cambios que ha sufrido Irlanda.

Un receptor, un parlante…El otro día
encontré una radio antigua
en un mercado de pulgas,
el barniz daba miedo, el dial estaba duro
y rechinaba, las entrañas apenas contenidas
por la cinta adhesiva puesta atrás.

¿Funcionaría? Giré la perilla:
una válvula se puso anaranjada, un ruido sibilante
conjuró el vacío, y se oyó una voz de hombre
clara y autoritaria, diciendo no las palabras
que medio me esperaba (“…por lo tanto
este país está en guerra…”) sino en cambio
“Irlanda regresa a los mercados mundiales,
El gobierno descarta default de los bonos,
Cierres en salud pública paralizan la nación”.
La apagué y me probé un casco.
(Pat Boran, Buscador de gangas)

Otro de los obstáculos que hubo de sufrir la evolución poética de los autores irlandeses fue el idioma, pues el gaélico fue el idioma dominante en la expresión literaria. Ya en el siglo XX, la corriente modernista adoptó la lengua inglesa para poder expandir su círculo de lectores y participar del cambiante mundo con su propia voz.

En esta edición de La memoria esparcida, perteneciente a la Colección uniendomundos, de la editorial cordobesa Detodoslosmares, se presentan los poemas en castellano y en inglés, respetando los signos de puntuación de los textos originales, como es el caso del uso del guión largo, algo emparentado con los puntos suspensivos del español, pero que en realidad sugiere una pausa diferente. Cada uno de los veintidós autores tiene unas líneas biográficas y el detalle de su obra publicada. La selección y la traducción estuvo a cargo de Gerardo Gambolini, poeta y traductor.

Irlanda es el país que más poetas ostenta dentro de su demografía, y La memoria esparcida es una buena oportunidad para adentrarse y disfrutar del espíritu sensible y valiente de esta generación de poetas que giran en la espiral del tiempo actualizando un antiguo linaje de druidas, descifrando la realidad en sus ancestrales valores enraizados profundamente en la vida. Silvia Bonetti

Líbranos, Señor, de la pérdida de intensidad,
ahora y todos los días
de un comienzo vigoroso, que desaparece
con la primera palabra dicha, el primer pájaro
en dar una nota falsa
o la ciudad anunciándose a sí misma
con ruido blanco y bocinas, entregando
a nuestras almas incorpóreas
donde sea que estemos, los frutos temporales
del Edén, el pasado y el futuro nuevamente.
(Harry Clifton, La hora del despertar)

La memoria esparcida
Poesía irlandesa actual
Gerardo Gambolini
Detodoslosmares / colección uniendomundos
244 pág.

Gerardo Gambolini (Buenos aires, 1955) es traductor y poeta. Tradujo, junto a Jorge Fondebrider, la Antología de Poesía irlandesa Contemporánea. Tradujo el ensayo La invención de Irlanda, de Declan Kiberd, y los Cuentos completos de John Mcgahern. Esta obra contó con el apoyo financiero del Ireland Literature Exchange, Dublín, Irlanda. ( irelandliterature.com )

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