NICOLA BENEDETTI, una metida de pata

Un prodigio del violín en las Tierras Altas

Un error puede costarle a un político su carrera, o al menos su buen nombre y honor. Las “metidas de pata” pueden ser de proporciones considerables (¿hará falta dar ejemplos?), o tan tontas, que uno no entiende cómo pueden ocurrir. El hecho que introduce esta nota sobre Nicola Benedetti  ocurrió hace ya más de una década, pero nunca viene mal hacer memoria. En 2003 el entonces primer ministro escocés Jack McConnell dejó entender que había dado su voto telefónico a favor de Michelle McManus, cantante nacida en Glasgow, que participaba del Pop Idol de ese año. McManus, efectivamente, ganó. 

Un año más tarde, otra escocesa de tan solo 16 años se alzaba con un primer premio, pero en la categoría música clásica. La violinista Nicola Benedetti ganaba el certamen “Young Musician of the Year” de la BBC, y se convirtió así en la primera persona nacida en Escocia en obtener el codiciado premio. Pero la felicitación del primer ministro llegó luego de que la opinión pública pusiera el grito en el cielo por el ninguneo inicial que McConnell demostrara hacia Benedetti.

Nicola Benedetti cumple 34 años en julio de este año. Entre el infortunado desplante de Jack McConnell y el presente, Nicola se ha afianzado, ha crecido profesionalmente, y hoy se la considera una de las violinistas más talentosas de su generación. Su origen familiar está bastante lejos de las frías regiones del mítico Highlander: su nombre y, con más razón, su apellido la delatan. Nicola es talentosa, y tiene además el temperamento y el apasionamiento proverbial de los de la península itálica.

A los 10 años ingresó a la Yehudi Menuhin School, pero su romance con el violín había comenzado cuando tenía cinco. Al finalizar su primer año en la escuela, tocó como solista en el concierto anual. Y a los 12, tocó con la Orquesta Nacional de Jóvenes de Escocia en presencia del Príncipe Eduardo. Benedetti ha sido premiada y condecorada en más de una ocasión. Con una carrera en ascenso, acarició el Grammy en 2020, en la categoría Mejor Instrumental Solista Clásico. El motivo: el álbum Violin Concerto; Fiddle Dance Suite, trabajo que Wynton Marsalis compuso para ella. Además ha tocado con directores de la talla de Vladimir Ashkenazy, Valery Gergiev, Zubin Mehta, Pinchas Zukerman y Vasily Petrenko entre otros.

En sus interpretaciones, Nicola combina el ardor mediterráneo con la templanza de las tierras más frías. Dedica tiempo y esfuerzo a la educación musical por medio de la Benedetti Foundation, que dentro de poco ofrecerá sesiones virtuales sobre el barroco, movimiento que a ella la apasiona. El violín es además algo así como un integrante más de la familia: su hermana Stephanie también es violinista. Es un instrumento que, en manos de Nicola Benedetti, se convierte en aquello que le permite a la artista llegar al alma de un público que la escucha con fruición. Aunque algún primer ministro se haga el desentendido. Viviana Aubele

Nicola Benedetti plays Bruch at the Last Night of the Proms 2012

Sitio Web Nicola Benedetti

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