ANA POR LA VENTANA, reconstrucción personal

Carla Pandolfi encarna con fuerza y sensibilidad el viaje de un alma que empieza a renacer

Ana por la ventanaActriz: Carla Pandolfi – Vestuario: Analía Manouelian – Iluminación: Claudio Del Bianco – Música y Sonido: Rafael Sucheras – Autor: Alfredo Allende – Director: Alberto Lecchi

Cambiar el rumbo de la vida es posible. A veces basta un solo momento, un objeto, para enfrentarnos a una nueva realidad. Pero antes, hay que despojarse de cosas materiales, de miedos, de imposiciones. Se trata, simplemente, de abrir paso a la libertad.

Una mañana, como tantas otras, una mujer se sumerge en su rutina. Bajo un torrencial aguacero, con un andar automático, sin mirar a su alrededor, una situación inesperada marca un quiebre decisivo en su destino. Algo brilla frente a ella: una moneda. Esa pequeña pieza la enceguece e impulsa un viaje interno por su pasado, cargado de intolerancias, sufrimiento, falta de valoración y olvido.

Vuelve a su casa. Frente a la ventana, ve la oportunidad de dejar atrás todo aquello que marcó su historia. En ese instante, toma las riendas. Desfilan, uno a uno, en el devenir de ese día clave: su madre, su jefe, sus amores. Saldando deudas y liberándose de prejuicios, la mujer emprende una búsqueda verdadera. Ya no se trata de conformar, sino de reconstruirse. Y esta vez, a su modo.

Ana por la ventana es interpretada por Carla Pandolfi, quien ofrece un desempeño impecable en el espacio escénico.  En formato de unipersonal, Pandolfi da vida a cada uno de los personajes con los que su protagonista se enfrenta: los invoca, los percibe, y parece realmente verlos e interactuar con ellos, como si estuvieran allí, lidiando con una mujer de otro tiempo. Con convicción, desenfreno y frescura, sostiene la atención del público; su tono de voz y expresividad no pasan desapercibidos, y son clave en la cálida aceptación que se manifiesta en el aplauso final.

La historia, contada en un clima intimista por Alfredo Allende, amplifica la transformación e interpela al espectador desde los primeros minutos. La puesta en escena de Alberto Lecchi resulta potente, con elementos interesantes como libros y un celular en acrílico que, lejos de distraer, acompañan con justeza la narrativa. Son objetos de algún momento en el tiempo de alguien. A esto se suman efectos sonoros acordes y a tiempo.

Ana por la ventana es una historia atemporal y sencilla que conmueve, invita a reflexionar y a soltar todas las mochilas que se interponen en el camino hacia una vida revitalizada. Sergio Boaglio

Viernes a las 22.30
El Camarín de las Musas
Mario Bravo 960 – CABA
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