Las de Barranco – Actúan: Rubén Pérez, Macarena Caballero De Rosa, Gastón Negrete De La Cruz, Federico Sepúlveda, Laura Rodríguez, Lenni Maldonado, Graciela Capelli, Cloe Gorosito, Luis Martinou, Matías Calabrese, Hernán Guebard, Jonathan Rodríguez, Santiago Etchepare – Vestuario: Laura Rodríguez – Autor: Gregorio de Laferrère – Director: Marcelo Silguero
Un clásico que siempre vuelve es este grotesco tragicómico de Gregorio de Laferrère, una obra que pone al desnudo las miserias de quien se rehúsa a aceptar que ya no puede presumir grandezas. Las de Barranco, ese genial retrato de unas pretenciosas ridículas es la obra por antonomasia del dramaturgo, periodista y político argentino. Las de Barranco es un drama que nunca pasa ni pasará de moda; nos interpela, cualquiera sea la época que nos toque vivir. En esta oportunidad, se trata de una excelente puesta de Marcelo Silguero.
Doña María (Rubén Pérez) es la matriarca de la familia, viuda de un respetable militar. Fue un acierto del director elegir a un actor en vez de una actriz: la dueña de casa debe ser madre y padre de tres hijas, todo en una sola persona. Las manipulaciones de la viuda de Barranco generan un poco de rechazo, y también un poco de lástima agigantada quizás por su desgraciado y merecido final. A Carmen (gran labor de Macarena Caballero De Rosa) la utilizará a conveniencia, y la joven quedará en medio de un tire y afloje constante entre salvar a su decadente familia y salvarse ella.
Las dos hermanas de Carmen proporcionan un interesante contrapunto para la abnegada muchacha. Pepa (Laura Rodríguez) se devanea entre la tilinguería más extrema y el resentimiento más oscuro. Sus “agarradas” con su hermana Manuela (Lenni Maldonado) y los raptos de candidez adolescente de esta última arrancan más de una carcajada en el público. Tanto Rodríguez como Maldonado se llevan las palmas en sus papeles.
Otro equilibrio interesante se da entre Morales (Gastón Negrete De La Cruz) y su antagonista Linares (Federico Sepúlveda), que compiten por el amor de Carmen. Ambos, no obstante, aunarán esfuerzos para contrarrestar los avances del siniestro Rocamora (Luis Martinou). El dentista Barroso (Hernán Guebard) y el cobrador Castro (Matías Calabrese) brindan un plus cómico, aspecto para el que ofrecerá una vuelta más de tuerca la criada Gertrudis (estupenda Graciela Capelli, que también encarna a Doña Rosario). Completan el elenco la des-pareja de Petrona (Cloe Gorosito) y Pérez (Santiago Etchepare), y la frescura de Genaro (el niño Jonathan Rodríguez).
La acción de Las de Barranco atrapa la atención del público; el desplazamiento de los personajes es aceitado y preciso. El espectador se verá, de manera intermitente, atrapado en la más absoluta hilaridad o inmerso en completa seriedad. El juego de luces en los momentos cumbre de la obra ayudarán a atender lo que hablan los personajes; en otros tramos, deberá estar muy pendientes de los movimientos y gestos de varios personajes en simultáneo. El vals Desde el alma, en versión de Osvaldo Pugliese -que abre el drama-, contribuye a darle a este grotesco criollo una cuota de sentimiento. Viviana Aubele
Domingos a las 17
Teatro Multiescena
Av. Corrientes 1765 – Cap.
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