EL DON, de Mai Jia

Una novela china sobre el misterio de ser distinto

Mai Jia es el seudónimo de Jiang Benhu, nacido en China en 1964. Consumado autor de best-sellers en su país, desembarca este año en el mercado de occidente con una novela que ya tiene doce años, El don, catalogada dentro del género “thriller de espionaje chino”. La trama entera gira en torno a un personaje único: Rong Jinzhen, para quien hacen falta muchos narradores que delineen su naturaleza críptica, iluminada desde diferentes ángulos.

Rong Jinzhen comienza su vida en el seno de una familia de comerciantes de sal, aunque ingresa en ella de manera ilegítima. Su madre muere durante el parto y su padre había muerto ya, antes de que él naciera. En calidad de huérfano es criado prácticamente en el abandono hasta que algún pariente comienza a descubrir en él los signos de una inteligencia fuera de serie. Aquí comienza el periplo de un chico casi autista, pero de facultades cognitivas exorbitantes.

Consigue el amparo estable de la familia, que lo acompaña en su rápido ascenso por las etapas escolares. Un amigo de la familia, un profesor de la universidad judío polaco, reconoce el talento natural del muchacho e intenta relacionarlo con la incipiente ciencia de los ordenadores, pero el destino le tenía reservada otra misión: es reclutado por el departamento de criptografía del servicio secreto chino, durante la revolución de Mao Tse Tung.

Todo el desenvolvimiento de Rong Jinzhen como criptógrafo es narrado por varios personajes que en su momento han alcanzado niveles importantes en el desciframiento de códigos secretos, pero siempre se deja claro que el nivel del protagonista es el más alto del firmamento. Aunque puede interpretarse que el relato tiene ribetes de espionaje y contraespionaje entre las naciones más poderosas del mundo, el eje narrativo se esfuerza por armar el perfil de un genio al que se trata de encajar en compartimentos que le son incómodos, y por quien se intenta acceder a una estructura de soledad que se presume irreparable.

Mai Jia se ha declarado en muchas entrevistas como un admirador de Jorge Luis Borges y de Gabriel García Márquez, dos autores latinoamericanos que la revolución cultural de Mao permitió difundir en China cuando él era joven. En esta, su primera novela -que le llevó once años terminar-, está presente la influencia de estos dos “grandes” de la literatura. Con muchos datos autobiográficos, ha construido una historia de ficción en la que se siente entusiasmo por dar vuelta las páginas. Silvia Bonetti

El don
Mai Jia

477 páginas
Planeta / Destino
Lecturalia

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