El pasado 24 de mayo, el pianista y compositor argentino Juan María Solare lanzó un nuevo álbum de su música para piano. Doce tracks de unos 40 minutos en total y de una estética que oscila entre el neoclasicismo y la Dark Academia, con un par de guiños a la música pop. El aura general del álbum es relativamente optimista (lo cual es muy bienvenido), con algunas excepciones donde puede percibirse tanto la profundidad de su pensamiento sonoro como una inevitable melancolía. En realidad el título del álbum y sus composiciones individuales están en inglés: Every Piano Has a Story. En el mundo actual no es siempre una decisión fácil determinar en qué idioma pueden estar los títulos.
Todo piano tiene una historia, así como cada cada ser humano la tiene. Una historia, un pasado, un cúmulo de experiencias, que decantan en lo que es hoy, en cómo suena hoy ese piano. Es ésta la historia, son éstas las historias que relata aquí Juan María mediante su instrumento. Es esta una colección de piezas muy atractivas que evocan naturaleza, sentimientos humanos, impresiones, sueños y recuerdos. Muy útiles para ser utilizadas en la educación musical y también muy aptas para el disfrute de los pianistas.
No puedo aquí profundizar en cada una de las doce gemas de este álbum, pero podría detenerme en dos: Pastures New (Nuevas pasturas), la sexta pieza del álbum. El título es una expresión británica que significa “buscar nuevos prados” o “ir a nuevas costas” o a “nuevos horizontes”. Implica marcar un corte y comenzar de nuevo en otro lugar (físico o metafórico). Se deja atrás la situación o la actividad actual, cambiando a otra que (esperamos) ofrezca mejores oportunidades. La expresión proviene del poema Lycidas(1637) del poeta inglés John Milton. La pieza es un vals delicioso y refinado, que nos remite a tiempos de antaño y recrea las alegrías de momentos del pasado.
Y como clara contrapartida a este vals optimista hallamos la séptima pista, Sailing Homewards (un título traducible como Navegando a casa o Navegando hacia el hogar). Éste es uno de los cinco títulos del álbum que incluyen referencias al agua, acaso una alegoría de la renovación y la purificación. Más que una melodía, en Sailing Homewards están en primer plano la armonía -los acordes- y una reflexiva melancolía. La pieza puede entenderse metafóricamente como la búsqueda y el redescubrimiento de las raíces. Es apuntar la brújula hacia el hogar y dar los primeros pasos en esa dirección. Sin embargo, me resulta inevitable recordar otro de los preludios pianísticos de Juan María (parte del álbum anterior, Lo intransferible), que lleva uno de los títulos más largos que he visto jamás: Casa no es un lugar, es un tiempo, y ese tiempo ya no existe. ¿Qué hacer entonces si ya no existe aquel hogar hacia donde habíamos orientado nuestra brújula y hacia donde estábamos navegando? Afortunadamente no debo responder aquí esta pregunta. Estela Telerman
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Recursos relacionados con Every Piano has a Story y descargar partituras
Diseño gráfico de portada por Yixiao Du,
estudiante en Hochschule für Künste, Bremen, Alemania
Sitio Web de Juan María Solare
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