Un grupo avanza portando una columna de cajas empaquetadas al borde del desmoronamiento. Lo hace coreografiadamente, al compás de la imponente música de Tannhäuser de Richard Wagner. Suenan en boca de una mujer textos de La divina comedia de Dante Alighieri. La combinación es impactante. Esa estética se mantendrá durante el resto del espectáculo, mostrando escenas cotidianas con la particular y muy original visión de la directora Eva Halac, al frente de un notable elenco formado en diferentes disciplinas artísticas.
La puesta se basa en el impacto visual, con precisa marcación de movimientos y posiciones actorales que parecen imposibles, como cuando interactúan subidos al ínfimo espacio que marca una de las cajas. Los textos son mínimos, dicen una cosa pero podrían decir otra. La elección de la música para cada cuadro, pasando por Philip Glass, Michael Nyman o Johann Strauss, genera emociones encontradas. La iluminación, diseñada por Leo Pérez, adquiere protagonismo junto a los efectos especiales, generando imágenes oníricas.
El subtítulo de Ansia -tour de force- indica el ímprobo esfuerzo de los protagonistas en un viaje hacia desconocidos destinos en busca -parafraseando a Proust- de tiempos perdidos, pero también de nuevos horizontes. Las escenográficas cajas serán protagonistas y compañía siempre, indicando puntos sólidos a veces, equilibrados por momentos, cerca del prolapso casi siempre, como la vida. La decadencia, el hundimiento y la ruina estarán acechantes para quienes no adviertan oportunamente el sendero preciso. Después de ese periplo, nada será como antes. Martin Wullich
Se dió hasta diciembre 2008
Teatro El Cubo
Zelaya 3053 – Cap.
(011) 4963-2568
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