LA NOCHE ANTES DE LOS BOSQUES, destacada labor

Original puesta en escena para el notable Mike Amigorena.

Autor: Bernard Marie Koltès – Actúa: Mike Amigorena – Vestuario: Silvio Rodríguez Molina – Escenografía: Alberto Negrín – Iluminación: Eli Sirlin – Música original: Iván Wyszogrod – Dirección general: Alejandra Ciurlanti

Desde aquella puesta en escena de “Roberto Zucco”, en 1994, en el “Callejón de los deseos” (tal el nombre del actual “Espacio Callejón” cuando aun era el teatrito de Miguel Ángel Solá), dirigida por Daniel Fanego, no se había visto mucho más de Bernard Marie Koltès. Los textos del autor francés son exquisitamente misteriosos, atractivos, y curiosos, pero muy particularmente en el caso de esta noche que se ubica geográfica y temporalmente detrás de ciertos bosques. Allí llega el personaje que encarna Mike Amigorena, en una actuación notable, plena de matices, y emotivamente subyugante. Alejandra Ciurlanti exprime lo mejor del actor y obtiene un jugo que sabe cítrico, amargo, áspero, pero que muta en el paladar de la mente a momentos burbujeantes, o de un dulzor indefinible y algo mórbido.

Desde el inicio, la palabra atrapa con una historia en la que hay que estar atento para disfrutar las innumerables aristas de la propuesta del autor. El potencial encuentro del personaje con otro –que es quizás su otro yo- genera un misterio subyacente ante lo que habría de ser y quizás no sea jamás. El clima creado por la escenografía y la iluminación, junto a la música de Iván Wyszogrod demarcan un círculo casi caucasiano, donde el protagonista juega con la libertad del encierro. La perspicaz Eli Sirlin muestra una vez más su inagotable creatividad para iluminar escenas, para contar historias solo con luz. En tanto, Alberto Negrín ha diseñado la escena como un circo donde se ve a la fiera enjaulada, incluyendo el anfiteatro logrado con sillas detrás de la escena que nos invita a la visión casi perversa de este ser humano que se convierte en presa encerrada y ensimismada, que encontrará tormentas y silentes paraísos cuando su mente lo permita, en una confrontación con nosotros mismos, en una inquisición acerca de lo que somos, en un intento por encontrar el orden dentro del caos. Idas y vueltas, reinvenciones, puntos de inflexión, olvidos, gestaciones, recuerdos, nostalgias, la vida misma está allí para que cada uno se coloque el sayo que le quepa.

En tan solo una hora, Amigorena da una prueba de actuación magistral, a la que suma canto y baile,  utilizando su voz, sus gestos, su cuerpo, su alma, para dejar su vida en la escena en aras de la aguda recreación de un hermético personaje. Martin Wullich

Se dió en Paseo La Plaza
Av. Corrientes 1660 – Cap.
(011) 6320-5350

www.paseolaplaza.com.ar

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