El mismísimo comienzo preanuncia todo, no sólo el preciosismo y las licencias musicales de Richard Strauss, sino también la visión de una imponente puesta en escena gestada por el canadiense Robert Carsen, que se conjuga con la Orquesta Estable del Teatro Colón sonando divinamente al mando de Alejo Pérez, sutil y exquisita, brillante y acorde al clima requerido. En cuanto aparecen los personajes en escena y emiten sus voces, el deleite es total. He aquí un trabajo operístico importante.
La entretenida trama sigue los lineamientos de una comedia, comenzando por la Mariscala que debe esconder a su amante Octavian por una puerta, mientras casi al mismo tiempo entra por la otra el Barón Ochs para hablar con ella de sus propias picardías. Con esa tónica y la suma de otros extravagantes personajes, contrastantes socialmente, manejadores de poder, urdidores de trapisondas, el riquísimo guión de Hugo von Hofmannsthal sorprende, estupendamente enmarcado por la música de R. Strauss.
El elenco fue muy parejo y destacable tanto en voces como en actuaciones. Manuela Uhl personificó con gran actitud a la Mariscala, aunque su voz podría haber dado más en determinadas ocasiones, habida cuenta de lo que nos brindó en Elektra en 2014 y en La mujer sin sombra en 2013. El Octavian de la mezzo estadounidense Jennifer Holloway, marcando al jovenzuelo de 17 años, tuvo sustancia, picardía y fluida emisión. El vienés Kurt Rydl entonó con su potente voz de bajo las líneas de su personaje pleno de perversión y misterio. Faninal fue muy bien representado por el barítono John Hancock, de voz meliflua y gran presencia para el personaje.
También brillaron dos cantantes locales. La soprano Oriana Favaro, plena de matices y encantadora en su elocuente gestualidad, corporizó una estupenda y sobresaliente Sophie, en tanto el tenor Darío Schmunck, hizo el personaje del cantante italiano con gran oficio y profesionalimo acorde con su registro. Los coros del Teatro, tanto el Estable como el de Niños, dirigidos por Miguel Martínez y César Bustamante, tuvieron momentos magníficos, particularmente el último, que los tuvo en escena desarrollando una muy buena labor histriónica.
La notable escenografía de Paul Steinberg es una fiesta profusa en detalles y utilería cuando hay festejos y festicholas, y ascética en el segundo acto con el imponente cañón. Durante las alucinaciones que sufre Ochs, los grandes cuadros del palacio mutan a imágenes orgiásticas y prostibularias vivas, estéticas y excitantes. La creativa iluminación del mismo regisseur acompaña y varía sutilmente, dejando lucir un vestuario notable tanto en uniformes militares y de sirvientes, músicos y camareros, como en las tenidas de fiesta y de calle. Martin Wullich
Fue el 18 de julio de 2017
Teatro Colón
Libertad 621 – Cap.
(011) 4378-7100
teatrocolon.org.ar
Otros cantantes: Luis Asmat, Ernesto Bauer, Fernando Chalabe, Mariano Crosio, Mario De Salvo, Laura Domínguez, Mariano Fernández Bustinza, Juan Font, Leonardo Fontan, Victoria Gaeta, Juan Pablo Labourdette, Alejo Laclau, Norberto Marcos, Alejandro Meerapfel, María Luisa Merino Ronda, Román Modzelewski, Marcelo Monzani, Laura Pisani, Germán Polón, Enzo Romano, Sebastián Russo, Reinaldo Samaniego, Eleonora Sancho, Duilio Smiriglia, Sergio Spina, Vanesa Tomas.
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