Juegos de palabras, humor inteligente y sutil, picardía en el decir y gestualidad superlativa conforman la impronta de todo show ideado por Eduardo Calvo. Pero en este fenómeno espectáculo futurista in vitro hay, además, un hilo conductor, una reflexión sobre determinados temas sociales y políticos del mundo actual y su próximo devenir, y hasta un homenaje a algunos autores y clásicos del humor.
Por las entretenidas páginas creadas junto a Gastón Troiano pasan -en diferentes personajes- los particulares humores de Gila, Pepe Biondi, Luis Sandrini y hasta la mujer sentada de Copi que ansía consultar a Umberto Eco. A cada uno, el descabellado Calvo le otorga su sello, respetando el original.
El sabio y mutante científico que personifica dicta una extravagante cátedra sobre un virus remanente –la risa- que ha descubierto luego de la destrucción de la Tierra. Y afirma sobre el final que “cuando ustedes rían se sentirán amos y señores porque se han invertido las relaciones de dominación. Y la risa no será un virus sino un nuevo arte capaz de aniquilar el miedo”.
Con una puesta pródiga y creativa en escenografía e iluminación, vestuario y elementos cuyo origen no será fácil detectar, los autores han apelado también a un toque poético y a una tierna inocencia, muy bien reflejados en diferentes discursos que no desdeñan el de un niño rico español o el de un soldado mercenario e influyente. Martin Wullich
Domingos a las 20.30
C. C. de la Cooperación
Av. Corrientes 1543 – Cap.
(11) 3050-1630
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