Estos hombres vuelan en serio, o por lo menos controlan la caída hacia donde quieren ir y cómo quieren hacerlo. Este es el arte de volar el cuerpo humano a través del aire usando un traje especial, llamado wingsuit, que forma el cuerpo humano en superficie de sustentación para poder crear, incluso, elevación. Eso dicen, yo veo que caen a velocidades inusitadas. El wingsuit crea superficie de sustentación con la tela cosida entre las piernas y debajo de los brazos. También se llama birdman o juego de la ardilla. Un wingsuit se puede volar desde cualquier punto que proporcione suficiente altitud para el deslizamiento a través del aire, por ejemplo el skydiving desde un avión o helicóptero o salto de ciertos puentes.
Quien practica wingsuit usa un paracaídas que desplegará a una altitud prevista y desabrochará las alas del brazo, en caso de necesidad, así pueden alcanzar las palancas del control y volar a un aterrizaje normal del paracaídas. J. T. Holmes -apodado el dueño de la montaña- y Jean Luc Loïc, un pionero de los deportes extremos, fueron los primeros en practicar freeskiing y han estado en la vanguardia del deporte por años. Holmes, junto a su amigo Shane Mc Conkey, ha ayudado a la evolución del esquí tal como se lo conocía hasta nuestros días. En invierno saltan con esquíes, pues no tienen otra forma de llegar al filo de la montaña, pero después los largan durante la caída.
El traje de alas moderno, desarrollado por primera vez a fines de la década de 1990, crea una superficie con tela entre las piernas y debajo de los brazos. Los trajes de alas a veces se denominan «trajes de hombre pájaro» (por los fabricantes del primer traje de alas comercializado), «trajes de ardilla voladora» (por su parecido con el animal) y «trajes de murciélago» (por su vago parecido con el animal o quizá con el superhéroe).
Un vuelo con traje de alas normalmente termina con el despliegue de un paracaídas, por lo que un traje de alas puede volarse con seguridad desde cualquier punto que proporcione suficiente altitud para el vuelo y el despliegue del paracaídas, normalmente un avión de descenso de paracaidismo o un punto de salida de salto BASE. El piloto del wingsuit lleva un equipo de paracaídas especialmente diseñado para el paracaidismo o el salto BASE. Mientras el vuelo en paracaídas es normal, el piloto de la campana suele desabrochar las alas del brazo (después del despliegue) para poder alcanzar los mandos de dirección del paracaídas y controlar la trayectoria de descenso. Martin Wullich
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