BEAUCHEF, de Exequiel Mantega

Una nueva obra de música sinfónica argentina comentada por su compositor

Podríamos presentar a Exequiel Mantega -compositor de Beauchef– diciendo que es un pianista y compositor argentino, director y arreglador de la Orquesta Sin Fin, agrupación con la que ha realizado presentaciones en importantes salas y junto a destacados artistas. Probablemente muchos porteños recuerden su actuación junto al pianista italiano Stefano Bollani en el Teatro Coliseo, por ejemplo. Recientemente, Bollani editó en Europa su primer disco de obras sinfónicas, y convocó al efecto a Mantega al frente de la Orquesta Sin Fin para la grabación.

Mantega además dirige, junto a la flautista Paulina Fain, la asociación cultural Tango Sin Fin, desde la cual realiza diversas actividades de formación y difusión de la música argentina. Ha grabado cuatro discos integrando el Dúo Fain-Mantega, pero también tiene otros álbumes como solista en piano, con su formación de trío o con su grupo La Máquina Cinemática.

Pero la noticia es que hace unas semanas Exequiel Mantega y la Orquesta Sin Fin estrenaron y registraron Beauchef, flamante obra sinfónica del compositor y pianista, cuyo correspondiente video dejamos al final de esta nota para que el lector pueda escucharla. El trabajo fue escrito durante 2020 y consta de cuatro movimientos, que el compositor designa como fases:  Construcción, Distancia, Aislamiento y Consecuencia.

Sin ser un concierto, la obra tiene pasajes solísticos que quedaron a cargo de Paulina Fain en la flauta, Guillermo Rubino en el violín y el propio compositor en el piano, quien además se hizo cargo de la dirección. Conversamos con él para que nos contara más detalles sobre su obra.

Hace bastante que las formalidades en la música, que prevalecieron durante tanto tiempo, parecen haber entrado en un terreno en el cual las etiquetas cada vez interesan menos. ¿En qué lugar se ubican Exequiel Mantega y Beauchef dentro del marco actual de la música?

Qué complejo es entenderse uno mismo, ¿no es verdad? Creo que dentro del amplio marco de la música, intentando hacer una gran síntesis, mi origen está en el mundo de la música popular. Más tarde vino la etapa del estudio formal, que se necesita para ordenar y ponerle nombre a las herramientas que se requieren a fin de desarrollarse como músico intérprete, compositor o arreglador.

Desde ese punto de vista me interesé más que nada en el desarrollo de la música argentina, tanto del tango como del folclore, no solo en los marcos más usuales, sino tratando de que nuestra música nacional sea invitada a formar parte de orgánicos orquestales. No estoy solo en esta búsqueda. Con Paulina Fain, mi compañera de ruta de tantos años, venimos haciendo un arduo trabajo en esta dirección junto a Tango Sin Fin y un conglomerado de proyectos que abrazan estos mismos objetivos.

En cuanto a Beauchef, cada movimiento tiene un orgánico independiente y a su vez varios solistas. Y esto sale de un proceso creativo relativamente libre, o incluso un tanto desordenado. Esta obra tuvo un primer movimiento que sirvió como disparador y después se empezó a desarrollar en el tiempo.

Beauchef tiene cuatro movimientos, cuyos títulos me resultaron llamativos: Construcción, Distancia, Aislamiento y Consecuencia. Hablame del sentido de estas palabras, que intuyo tendrán que ver tanto con la obra como con vos.

Sí, estos términos son casi una descripción explícita de cada uno de los momentos en los cuales fue escrita la obra. Por ejemplo, Construcción coincidió con el final de una obra muy grande que hicimos en nuestra nueva casa, durante la fase uno de la pandemia. Luego vinieron las fases de aislamiento, y aparecieron los movimientos restantes. En gran parte este trabajo fue un cable a tierra para conectar con el desarrollo musical, dentro de un marco tan hostil. A su vez fue una gran excusa para volver a juntar la orquesta, en la manera que fuera posible.

¿El nombre Orquesta Sin Fin alude a que no tiene una finalidad específica?

La orquesta nació en el desarrollo del proyecto Estaciones Sinfónicas. En ese marco hicimos cuatro conciertos muy diversos y diferentes entre sí, con artistas de raíz folclórica como Nadia Larcher, Aca Seca Trío, Duratierra y el Dúo Fain-Mantega. En cada uno de esos conciertos hubo requerimientos musicales muy diferentes, y la orquesta fue mutando en cada presentación. En definitiva la orquesta nace de un proyecto que tuvo los mismos objetivos y punto de partida de Beauchef, que sería el de llevar la música argentina a un marco sinfónico.

¿Sentís que Beauchef es un punto de llegada o de partida para algo que todavía está por venir? ¿Y cuál es la razón del título?

En la calle Beauchef al 1900 construimos nuestra casa. A su vez, allí se escribió la obra, y luego se grabó. El título es el mínimo reconocimiento que podía hacerle a este hermoso espacio familiar. En cuanto a lo otro, siento que podría pensar la obra como un punto de partida, o más bien como una foto actualizada. El objetivo principal lo vengo estudiando y desarrollando desde hace varios años, y esta obra es solo una fotografía de ahora. Seguramente sea un punto de partida para nuevas ideas y proyectos, pero bajo ningún concepto lo considero un punto de llegada. Estamos en movimiento todo el tiempo.

Publicado en:

Deja una respuesta