Este verano la marca Adriana Costantini ha tomado tres tendencias bien definidas. Comienza con un viaje a tierras ya visitadas para buscar nuevas sensaciones. Recorre desiertos y descubre tribus que aportan colores brillantes en medio de la neutralidad de colores terrosos, destacando cazadoras, bermudas y chemisses. El salvajismo animal de la sabana invade con estampas las texturas.
El próximo destino son Tierras de las 1000 y una noches, de donde llegan las nuevas siluetas de los pantalones babuchas, las camisas largas, las texturas naturales como gasas, sedas y shantung. Los bordados tienen gran protagonismo, son de nácar, coco, madera, apliques de crochet, y conectan con la naturaleza. El viaje de Adriana Costantini continúa el viaje por la riviera mediterránea donde los días soleados permiten contemplar la amplia gama de azules y turquesas, que se combinan en rayas y se adornan con flores, innovando el ya conocido look naviero.
Los tradicionales rojos se tornan corales y los verdes se han transformado en aguas. Los looks son más urbanos, las camisas aparecen en escena bajo blazers que son objeto indiscutible para esta tendencia. Los trajes de baño aportan su frescura con estampados y accesorios. Los bordados artesanales rompen las rayas y el dorado lo aportan los avíos. Hay fluidez con brisa de mar para la noche en finas gasas de seda.
La última tendencia de Adriana Costantini impacta con una explosión de color en primavera, flores, florcitas, florones y megaflores; multicolores, a un color, con hojas; alegran esta temporada en todos los estampados que aparecen, se combinan con rayas, perfuman de color el verano, corales, naranjas, amarillos, aquas, verdes, orquídeas. Los looks son informales, principalmente vestidos, túnicas y camisolas. Los bordados adoptan formas florales en distintos materiales. ¡Mucha Alegría! es la definición de esta tendencia.
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