HABLEMOS A CALZÓN QUITADO, teatro superior

Tres hombres en un relato conmovedor y sensible. Brillante trabajo de Ulises Pafundi.

Hablemos a calzón quitadoActúan: Oscar Giménez, Ulises Pafundi y Pablo Plandolit – Vestuario: Cecilia Carini – Escenografía: Iván Salvioli – Iluminación: Nicolás Dominici, Nicolás Mizrahi y Iván Salvioli – Música: Mirko Mescia – Autor:  Guillermo Gentile – Dirección: Nicolás Dominici

Hablemos a calzón quitado, el reflexivo y provocador relato de Guillermo Gentile, es tan palpitante como cuando fue escrito, hace más de 40 años. Parece increíble la relación entre tres personas que se ven “normales”, tal como lo afirma uno de ellos, cuando individualmente poseen una característica especial bastante alejada de lo que la sociedad observa como normal, junto a otras virtudes que los hacen absolutamente queribles. Allí están, conviviendo bajo el mismo techo, un joven mentalmente retrasado, pero con destellos de brillantez, que sabe cuando conviene esconder, y una necesidad imperiosa de afecto; un padre crápula e hipócrita, que sin embargo hace todo por su hijo, con un amor desbordante; y un estudiante intelectual alicaído económicamente que se enternece con el chico y adivina un potencial caldo de cultivo para explayar sus ideas revolucionarias.

Las actuaciones de quienes dan vida a los personajes son buenísimas y muy parejas. Pablo Plandolit compone al transparente estudiante que es capaz de refutar ideas y oponerse sin ambages al padre, generando una actuación de justa medida. Oscar Giménez, en el papel del padre que se traviste para lograr sus objetivos, trabaja su misterioso personaje en un apasionante crescendo, generando un especial suspenso y sorprendiendo con distintos climas de acuerdo a lo que siente, particularmente cuando todo se le viene abajo. En tanto, Ulises Pafundi –como el joven retrasado- lleva a cabo un trabajo colosal, de un histrionismo superlativo, con un estudio notable y minucioso de su personaje, generando sobrada emoción en cada momento. El profesionalismo de Pafundi se hace evidente en esta creación maestra, digna de premio.

La puesta en escena que ha generado Nicolás Dominici, aprovechando puertas naturales de la sala, es original y acompaña las sensaciones de la historia. También ha dirigido inteligentemente, marcando con precisión tiempos y movimientos, y extrayendo todo el potencial de los actores. Quizás el final debería haber sido más acotado, pero es sólo la visión subjetiva de alguien más que dejó la sala con la emoción a flor de piel, con el placer de haber visto teatro con mayúsculas. Martin Wullich

HABLEMOS A CALZON QUITADO - www.martinwullich.com

Se dio hasta fin de 2013
Teatro El Duende

Aráoz 1469 – Cap.
(011) 4831-1538

Vota esta nota

¡Haz clic en una estrella para puntuarlo!

Promedio de puntuación / 5. Recuento de votos:

Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este contenido.

Publicado en:

Deja una respuesta