Es siempre un placer recorrer diferentes galerías de arte cuando se organizan los Gallery Days. En el circuito Palermo-Villa Crespo me encontré con un título curioso y un proyecto muy recomendable: ¿Qué no tiene remedio? de Alejandro Elía.
Según palabras del autor la obra se realizó a partir de las respuestas brindadas ante esa pregunta, formulada a amigos virtuales en redes sociales. Así surgieron ideas y respuestas que eran constantes, o bien interrogaban, o revelaban problemáticas comunes, todos ejes significativos desde donde comenzar a abordar conceptualmente la obra.
Alejandro Elía tomó temas como el amor, la vida y la muerte, lo dicho (las palabras dichas o las guardadas con dolor), la corrupción, y otros. Al parecer -no obstante los vertiginosos cambios producidos en esta última década en las formas de comunicación-, el ser humano continúa teniendo interrogantes profundos desde la llegada de la sociedad organizada. Y aún no ha podido ser rescatado de un lugar de alta vulnerabilidad emocional y de un creciente extravío existencial.
Contrariamente, el desarrollo tecnológico sólo ha aportado soluciones a situaciones vitales puntuales, como el cuidado de la belleza física, la educación a través de la informática o el confort. La cura o la contención de ciertas enfermedades, atribuida en gran parte a la ingesta de medicamentos alopáticos, es otra “solución” aportada por la industria y la investigación farmacéutica, hoy de alcance mundial.
Pero al ver la obra de Alejandro Elía me pregunto ¿Estos remedios son acaso milagrosos? ¿Son dioses? ¿Acaban con todas nuestras penurias? ¿Son imprescindibles? ¿Somos manipulados por ellos? Y piendo que los remedios se vuelven indiferenciados, los remedios terminan siendo las personas que los consumen. Mariano Augugliaro
Se exhibió hasta 8 de septiembre 2018
Atelier Aguirre
Aguirre 1551 2do. 4 – Cap.
@alejandroelia.arte
Alejandro Elía en Instagram
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