Pirottecnia – Ariel Pirotti Cuarteto – Músicos: Damián Foretic (bandoneón), German Rudmisky (contrabajo), Guillermo Olguin (violín), Ariel Pirotti (piano y composición) – Artista invitado: Guillermo Bonetto (Los Cafres)
En What Shouldn’t Change About Classical Music, un artículo publicado esta semana en el New York Times, el crítico Anthony Tommassini plasmó su mirada sobre la música clásica, ámbito en el que se ha movido con fluidez durante su carrera periodística. Comentó que “las orquestas y compañías operísticas más importantes deben dar prioridad a entablar relaciones fructíferas con los compositores que viven en la actualidad”. Aunque sin soslayar la trascendencia de los compositores de antaño y de las grandes obras que son pilares de la música clásica, Tommassini cree que el repertorio estándar no tiene por qué quitarle vitalidad a la música, y que es importante dar espacio a las contribuciones de los compositores surgidos en el último siglo.
Tommassini hacía referencia, claro, a la música clásica, pero sus dichos bien pueden trasladarse a otros géneros, como el tango y el folklore. Ariel Pirotti Cuarteto lanzó, casi en consonancia con el artículo de Tommassini (¿existirán las casualidades?), el álbum Pirottecnia. Ariel Pirotti ya había presentado este año Estación Piazzola, un proyecto que homenajea a Astor en el centenario de su nacimiento. Homenaje que reitera con una cuidada versión de Libertango, donde los cuatro músicos -pianista, violinista, contrabajista y bandoneonista- se lucen por igual.
Retomando lo dicho por Tommassini, Pirottecnia presenta composiciones de Ariel Pirotti. Inesita es una hermosa zamba para piano y orquesta de cuerdas, compuesta en honor a una tía suya y a una casa familiar en la costa atlántica que lleva ese nombre. El homenaje familiar está presente también en Antonio Porteño, dedicado a su abuelo, un tango que -según el mismo compositor- está teñido con algo de Piazzola y algo de Horacio Salgán. Una cosa similar ocurre con Bajo el cielo de Calabria, nostálgico tema dedicado a unos amigos de la península itálica, que destaca las melancólicas sonoridades de las cuerdas.
Pirottécnico pone de manifiesto el lucimiento del violín; así lo manifiesta el compositor, aunque es evidente que todo el cuarteto hace un gran trabajo. Tangoide es un tema que integra la música incidental para el documental por los primeros diez años de la Orquesta de la Universidad Nacional de las Artes. Noche de reencuentro es un cálido tango que nos permite el reencuentro con nuestra música ciudadana. Como valor agregado, Guillermo Bonetto, de Los Cafres, fue la voz invitada para Por la vuelta, precioso tango escrito por Enrique Cadícamo con música de José Tinelli.
Ariel Pirotti no solo es un excelente arreglador, sino también uno de los compositores argentinos más importantes de este tiempo, con una muy interesante proyección a futuro que merece la pena seguir de cerca. Viviana Aubele