Avaricia – Actúan: Maggy De Luca, Victoria Díaz, Melody Llarens, Nacha Malen, Mayra Martino, Silvia Petri, Sol Wainer, Valu Zapata – Autor: Norman Barbei – Dirección: Gabriel Villalba
En una casa pueblerina de una familia acomodada, alejada del mundanal ruido, donde todo debería ser ideal, donde deberían imperar la paz y la tranquilidad, pasan cosas. La mirada atenta de María (Maggy de Luca) vigila que Jessy (Victoria Díaz) cumpla sus tareas como mucama a la perfección. La llegada de Millie (Valu Zapata) parece ser la excusa para una cordial y placentera reunión familiar. Pero los problemas no tardan en llegar. Ruidos extraños, ladridos de perros, teléfono cortado, apagones, y una vivienda que minuto a minuto se deteriora cual casa de Usher ponen el clima para una historia donde se fusiona el misterio policial con un ensayo de thriller psicológico. Todas contra todas, y al parecer, todas contra uno: el jefe de familia.
Los celos y las envidias entre Paula (Mayra Martino) y Andrea (Melody Llarens) se tornan inmanejables para su madre, Francisca (Silvia Petri). Vanesa (Nacha Malen) mira con recelo a todas, y Agustina (Sol Wainer) recurre a todo tipo de novela policial para tratar de develar un misterio: la inesperada muerte de Fernando, el patriarca de una familia eminentemente femenina, pero ausente de principio a fin.
Las sospechas, las conjeturas y las recriminaciones de unas hacia otras y viceversa se suceden a la velocidad de un rayo. ¿Todas son inocentes? ¿Todas son culpables? ¿Quién mató a Fernando? ¿Y por qué? La enorme casa va acorralando a cada una de estas ocho mujeres, y nadie sabe quién será la próxima traidora, o la próxima traicionada. La alienación aumenta minuto a minuto; las acusaciones van subiendo de tono sin que nadie, excepto una, se dé cuenta de que son conducidas hacia un final revelador.
Aunque su título es sugerente, Avaricia sugiere quizás algo menos relacionado a esa cuestión como a otras más prosaicas. La curiosidad de saber qué fue lo que pasó realmente con el padre de familia se ve matizada con momentos sumamente desopilantes, bien marcados por el director Gabriel Villalba. Con algunos personajes con más desarrollo que otros y algunas cuestiones engorrosas de desplazamiento en el escenario, la obra tiene como punto más alto los diálogos entre la hipocondríaca Andrea y su peculiar madre, y las continuas referencias de Agustina a cuestiones del género policial.
Avaricia es, además, una manera de poner al descubierto las miserias humanas en personajes femeninos; miserias que, no obstante, no contemplan sexo ni clase social. Viviana Aubele
Se dio hasta el 24 de junio 2022
Teatro Gargantúa
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