El ojo del panóptico – Dramaturgia: Ernesto Pombo – Actúan: Luciana Bisi, Santiago Dragani, Mariana Fernández Saham, Maximiliano García, Rodrigo Martínez y Jazmín Terclavers – Vestuario: Macarena García – Escenografía: Maximiliano Pouchan – Música: Leandro Barrales y Ernesto Pombo – Dirección: Maximiliano García y Ernesto Pombo
Según se informa al comienzo del espectáculo, un panóptico es un sistema -ideado por un tal Bentham-, que utiliza una especial arquitectura para controlar los movimientos de varios reclusos en una cárcel, sin ser observado por ellos. En consecuencia, los presos pierden toda noción del momento en que se los vigila, sumiéndolos en un estado de opresión debido a la pérdida de la intimidad. Ese estado es, de algún modo, el que se intenta reflejar a través de tres momentos –Miedo, Culpa, Dolor- durante el transcurso de la multimediática y multidisciplinaria obra.
Con profusión de efectos de iluminación, sonoros, gráficos y de video, utilizados en presentaciones de fuerza, acrobacia, danza y mucho manejo gestual y corporal, Ernesto Pombo ha ideado una obra que impresiona y sorprende. En la total oscuridad de la pequeña sala, donde a duras penas se observan las cintas fosforescentes que guían a los dúctiles intérpretes, casi en contacto directo con ellos, apareciendo y desapareciendo repentinamente, recibiendo desde alguna recóndita dirección una serie de naipes voladores, oyendo música algo minimalista, electrónicamente sobrecogedora, con un llamativo vestuario, las figuras se transforman en metáforas de esos miedos del hombre de todas las épocas, de las culpas que se inflige, de los dolores que lo someten.
Sin embargo, muchas imágenes reales y proyectadas son repetitivas, las visiones se alargan demasiado, y el asombro que debería ser predominante entra, hacia el final, en un indeseado letargo. El mayor atractivo está dado por la estética generada con la sutil y contrastante iluminación, las formas y cuerpos en estrambóticas posiciones no exentas de gran sensualidad, las coreografías apabullantes, y la consternación como denominador común. Martin Wullich
Se dio hasta fin de noviembre 2009
Ciudad Cultural Konex
Sarmiento 3131 – Cap.
(011) 4864-3200
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