SÓNICO, entre Rovira y Piazzolla

Un ensamble belga rescata la vanguardia tanguera porteña del siglo pasado

Puede parecer algo extraño. Pero Sónico es un ensamble creado en Bruselas (Bélgica), dedicado a rescatar el repertorio de Eduardo Rovira, compositor argentino que fue clave en la creación del llamado “nuevo tango”. Relacionado a menudo con la figura de Astor Piazzolla, Rovira fue uno de los protagonistas centrales de la vanguardia porteña de la década del sesenta. Sus innovaciones en el tango fueron tan importantes que el propio Piazzolla alguna vez reconoció: “Hubo un tiempo en que Rovira fue más revolucionario que yo”. Sin embargo, por diversos motivos, y a diferencia de su colega, su obra todavía hoy sigue pendiente de una mayor difusión.

Aquí es donde aparece Sónico. Creado en 2015, el ensamble ya se ha posicionado como uno de los conjuntos de tango contemporáneo más interesantes, habiéndose presentado en importantes festivales y salas de conciertos de Europa y América Latina. El grupo tiene tres discos terminados: el primero de ellos, titulado Eduardo Rovira: La otra vanguardia, fue lanzado en agosto de 2018  y se presentó en el Festival de Tango BA (Argentina). Elegido como uno de los diez mejores álbumes de tango por la revista Billboard, el disco fue grabado en la Ópera Nacional de Bélgica (La Monnaie) y tuvo su presentación europea en el Palacio de Bellas Artes de Bruselas.

El segundo disco, Eduardo Rovira: Inédito e inconcluso, fue grabado en diciembre de 2019 en la Academiezaal de Sint-Truiden. Este álbum fue el resultado de un importante trabajo de investigación, que llevó a la transcripción de catorce piezas basadas en manuscritos y grabaciones no comerciales. Y en cuanto al tercer álbum, titulado The Edge of Tango, integrado por obras de Rovira y de Piazzolla, tendrá su première el próximo 30 de mayo en el Minard Schouwburg de Gante, en un concierto que será grabado y emitido por televisión. Luego el disco será presentado en la tercera gira del grupo por América Latina (septiembre de 2021), seguida por un tour en Europa (octubre 2021-febrero 2022).

Sobre todas estas cuestiones conversamos con el contrabajista y miembro fundador del grupo, Ariel Eberstein.

ud835udde6ud835udde2ud835udde1ud835udddcud835uddd6ud835udde2 (Eduardo Rovira)

En la página del ensamble dice que Rovira a menudo ha sido erróneamente considerado ‘el otro Astor Piazzolla’. ¿De dónde surge esa relación fallida entre los dos músicos?
Astor Piazzolla y Eduardo Rovira son dos exponentes que surgen como consecuencia de la saturación del formulismo repetitivo del tango tradicional. Como consecuencia de esto, tanto Rovira como Piazzolla se embarcan en la búsqueda de un «nuevo tango». Al ser los máximos exponentes en la creación de un tango de vanguardia, hubo quienes trataron de confrontarlos y generar una falsa oposición. La realidad es que ambos se admiraban y se mantenían informados sobre sus respectivos desarrollos artísticos. Sin embargo, aunque el punto de partida haya sido el mismo, las búsquedas musicales de uno y otro fueron totalmente diferentes. Desde este punto de vista podemos refutar que Rovira haya sido una copia de Piazzolla, que es el sentido de la expresión «el otro». Por el contrario, fue un renovador con una impronta propia, que dejó su huella en la música de vanguardia de los años ’60.

Eduardo Rovira en la Argentina es un nombre considerado de culto por algunos, como un clásico por otros, y finalmente -a diferencia de Piazzolla- alguien cuya obra es todavía desconocida por muchos más. ¿Cómo es que un grupo de músicos de Bruselas llega a interesarse en su música?
Bélgica es la capital del surrealismo. En estos confines, el plan para rescatar a un músico de tango contemporáneo que ni siquiera se interpreta en su propio país no parece algo tan alocado. Hablando en serio, la idea de crear un grupo en torno a la obra de Eduardo Rovira surgió por casualidad. Como resultado de la búsqueda de material instrumental para otro proyecto, me encontré con un disco de obras suyas, titulado precisamente Sonico. A partir de ese momento no pude deshacerme de la idea de crear un proyecto en torno de esa música. En 2015, junto a Stephen Meyer y Lysandre Donoso, durante el Festival de Tango de Bruselas, decidimos crear Sónico, con el objetivo de interpretar la obra de Rovira. Surgió así un trabajo de recuperación, partiendo de archivos y/o transcripciones de materiales que se había perdido o estaba diseminado. A finales de 2018 grabamos nuestro primer disco, La otra vanguardia, que difunde de manera exclusiva obras de Rovira. Ese álbum lo presentamos en el BA Tango Festival durante nuestra primera y extensa gira por Argentina, que incluyó otra actuación en Buenos Aires, en el Club Atlético Fernández Fierro, y presentaciones en La Plata, Rosario y Córdoba.

Vos sos uno de los integrantes argentinos del grupo. Me gustaría que me cuentes cómo es apreciada la música argentina en general, y la de Rovira en particular, por los músicos y el público medio europeos.
Evidentemente Europa es un continente vasto y con grandísimas diferencias culturales, que influyen en la percepción de cualquier expresión artística. Al mismo tiempo, la música argentina es variada. Por eso me limito a expresarte mis experiencias en Bélgica con respecto a nuestra propuesta. La música de Rovira es percibida de una manera muy natural. Como punto de partida, no existe ningún tipo de prejuicio por el cual se compare a Rovira con Piazzolla, por ejemplo. Tampoco existe la controversia entre lo tradicional y lo de vanguardia. Desde ese punto de vista, esta música es aceptada mucho más naturalmente, quizás, que en la propia Argentina. Por el otro lado, hay mucho menos contexto y a veces uno se encuentra hablando de temáticas que escapan al público, lo cual resulta en cierto desapego cultural.

Piazzolla decía que uno de los motivos por los que su música fue en su momento tan resistida era que no podía bailarse. Se refería, por supuesto, al tango en su sentido tradicional. Muchos coreógrafos más tarde demostraron que esas músicas sí podían ser bailadas. Ustedes, con la música de Rovira, vienen desarrollando una relación artística con la coreógrafa Lisi Estaras. ¿Cómo es esa experiencia?
Estoy de acuerdo cuando tanto Piazzolla como Rovira se refieren al hecho de que su música es «de la cintura para arriba». Ellos estaban hablando ahí del tango de salón, donde la improvisación juega un rol muy predominante, que no es el caso de la danza coreografiada. Obviamente se pueden hacer coreografías con esta música, como con cualquier otra. En el caso de Rovira, si bien él buscaba desarrollar una música que fuese para escuchar, al igual que Piazzolla, al mismo tiempo, a fines de los años ’50 escribió un tango ballet que lamentablemente nunca fue coreografiado, lo que nos dificulta saber cuál hubiera sido la relación que él mismo hubiese querido, en una supuesta unión entre la danza contemporánea y su música.

Con respecto a la colaboración que estamos desarrollando con Lisi Estaras desde el 2019, ésta incluye la creación de una obra titulada The Heart is the Muscle We Like to Workout, primera que incluye repertorio exclusivamente de Rovira en unión con la danza contemporánea. Lisi Estaras intentó sacar provecho de la teatralidad inmanente en la música de Eduardo Rovira, buscando una fisicalidad clownesca.

El grupo ha evolucionado recientemente de quinteto a octeto. Contame por favor los objetivos musicales que motivaron este proceso.
SONICO ha decidido explorar las diferentes facetas de la obra de Eduardo Rovira en sus formatos originales. Nuestro primer registro, La otra vanguardia, presentó sus obras más conocidas en formación de trío y cuarteto. Nuestro segundo álbum, Inédito e inconcluso, mantuvo la búsqueda con estas formaciones, pero con material nunca antes grabado. Para nuestro tercer álbum, The Edge of Tango, decidimos reconstruir la música del Octeto Buenos Aires y del Octeto La Plata, las primeras formaciones de vanguardia de Piazzolla y Rovira, respectivamente.

En el caso del Octeto La Plata, esa formación no dejó grabaciones. El trabajo de investigación y las transcripciones realizadas por SONICO no solo rescatan un repertorio que estaba perdido. Porque Piazzolla quemó sus partituras, y los originales de Rovira fueron estropeados por una inundación. Además incorpora cuatro versiones inéditas, que solo se habían conservado en unos registros no profesionales.

El título de este doble retrato no fue elegido al azar. The Edge of Tango presenta simultáneamente, por primera vez, la música de ambos octetos, exponentes inaugurales de la vanguardia en el tango. Con estos conjuntos, tanto Rovira como Piazzolla viajaron por primera vez por los bordes del género. Más que plantearse como un homenaje, este nuevo disco intenta revisar el origen del tango de vanguardia. Germán A. Serain

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Sónico está integrado por: Lysandre Donoso y Carmela Delgado (bandoneones),
Stephen Meyer y Daniel Hurtado Jimenez (violines), Oscar Quiñonez (viola),
Guillaume Lagravière (cello), Camilo Córdoba (guitarra), Ariel Eberstein (contrabajo),
Ivo De Greef (piano), Gaetan La Mela (glockenspiel).

Página Web de Sónico

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