LAS CUÑADAS, reputaciones y cosméticos

El alto costo de preservar el buen nombre en una comedia hilarante

Las cuñadasActúan: Julia Galeano, Mercedes Moltedo, Florencia Naftulewicz – Escenografía e Iluminación: Leandro Crocco – Dramaturgia: Florencia Naftulewicz – Dirección: Pilar Boyle y  Florencia Naftulewicz

Ocultar las verdades incómodas de una familia puede ser más difícil de lo que parece, y más cuando se idean planes descabellados que incluyen la manipulación de personas externas a la familia, como una manicura. Gynette y Gyselle son cuñadas, las unen muchas cosas: los rituales de belleza cotidianos, la clase a la que ahora ellas mismas pertenecen, la desesperación por guardar las apariencias, las charlas repletas de frivolidades, las prácticas como el pilates y el mindfulness.

Las cuñadas es una comedia inteligente porque desnuda con ferocidad los ridículos hábitos de una clase social. Estamos ante dos mujeres: una con su marido homosexual; la otra, la hermana del hombre que desea proteger la fachada de una financiera y cree que, si se descubre la verdad, se arruinaría la reputación del negocio financiero familiar. Para evitar las habladurías, la mejor idea que se le ocurre a la hermana es hacer pasar a la manicura por la amante de su hermano. Allí comienza un juego de negociaciones y extorsiones. Sale a la luz el costado más vil y cruel de estas señoras bien.

El guion de Las cuñadas está escrito en verso y su ritmo nos va llevando como si estuviéramos en un partido de ping-pong, siguiendo los golpes de la pelota de uno y de otro lado. Estas mujeres son venenosas como víboras y ni siquiera logran una complicidad entre ellas porque están demasiado preocupadas por mantener el dominio de la situación. Es claro que una de ellas logra imponerse con actitudes violentas y un carácter avasallante.

Las actrices se lucen a cada momento, desnudando cada una de las miserias que habitan en sus personajes. El texto de Florencia Naftulewicz no deja títere con cabeza, nos entrega una sátira donde nada ni nadie queda en pie. Es un festín para el sarcasmo y las lenguas afiladas. Por eso Las cuñadas recuerda a piezas como Tarascones de Gonzalo Demaría, y resulta un punzante retrato de esas familias que se ven tan perfectas por fuera que uno empieza a sospechar que por dentro hay algo que se pudre. Milly Vázquez

Miércoles a las 20.30
Teatro Metropolitan
Av. Corrientes 1343 – Cap.
Localidades por PlateaNet

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