La panelista (2021) – Elenco: Coty Álvarez, Magui Bravi, Martín Campilongo, Laura Cerati, Laura Cymer, José Luis Gioia, Diego Muñoz, Florencia Peña, Favio Posca, Daniela Ramírez, Diego Ramos, Diego Reinhold, Soledad Silveyra, Gonzalo Suárez, Gonzalo Valenzuela, Diego Ramos – Guion: Maxi Gutiérrez, Gonzalo Salaya, Azul Lombardía, Jorge Maestro – Fotografía: Hugo Colace – Arte: Mariano Smaldini – Vestuario: Cecilia Coronado – Música: Octavio Stampalia – Dirección: Maximiliano Gutiérrez
Hoy está Chiqui Marconi, mañana puede estar Ricky Toledo, o quizá Marcela Robledo, o… En la televisión todo parece ser efímero, vertiginoso; todo gira cual veleta librada a merced de un vendaval. Como en veredas opuestas de una gran avenida, circo y realidad se miran y acaso se crucen. En el medio están los celos (¿profesionales?), la lucha por la supervivencia, el todo vale, lo frívolo, la vida y la muerte, con el fin de alcanzar a un público que hoy es fiel a un programa, mañana puede no serlo. O quizás deje de serlo antes del corte comercial.
Con el recurso del thriller como excusa, el director Maximiliano Gutiérrez explora los límites de los escrúpulos y cuán lejos se puede llegar por mantener el rating, el puesto laboral y alcanzar la tan dorada fama. Egos al máximo manifestados por Chiqui Marconi (Favio Posca) y Ricky Toledo (Diego Reinhold), conductor y panelista respectivamente, son fogoneados por Claudia (Soledad Silveyra), una gerente de producción con tantos pruritos como sus subordinados.
Marcela Robledo (Florencia Peña), una panelista con más aspiraciones que criterio y talento, revelará un terrible secreto sobre el galán del momento, Gustavo Lebló (Diego Muñoz). Marcela ocultará, sin embargo, sus propios secretos y evitará por todos los medios una némesis en ciernes. En este circo, un “tapado” como Tapia (Martín Campilongo) o un insignificante eslabón en la cadena como los responsables de seguridad (José Luis Gioia y Gonzalo Valenzuela) pueden mantener el statu quo o torcer el rumbo de las cosas con la misma celeridad con que se vive y trabaja en el piso de un estudio de TV.
La frivolidad más absurda expondrá a estos personajes en un alocado sistema que tarde o temprano hará caer las máscaras de los artistas y los confrontará a sus mismas miserias. El muy logrado set de programa de chimentos, su dinámica, el lenguaje, el vestuario y los clichés empleados por conductor y panelistas, nos harán sentir que estamos cómodamente instalados en el living de nuestras casas mirando uno de esos programas. Nos dejarán también el interrogante de si lo que nos muestran en la televisión es la verdad o mera ficción. Viviana Aubele
